El clásico regiomontano siempre es un partido que genera grandes emociones y expectativas entre los aficionados de Rayados y Tigres. Y en esta ocasión, el equipo albiazul salió victorioso al derrotar a su acérrimo rival con un marcador de 1-0 en el partido de ida de los cuartos de final de la Liga MX.
El encuentro se llevó a cabo en el Estadio Universitario, casa de los Tigres, y desde el inicio se pudo sentir la intensidad y la pasión que caracteriza a este clásico. Ambos equipos salieron a la cancha con la firme convicción de llevarse la victoria y meter un paso más hacia el tan ansiado título.
Sin embargo, fue Rayados quien se mostró más contundente y logró imponer su juego desde el primer minuto. Con una sólida defensa y un medio campo bien organizado, el equipo dirigido por el Tano Ortiz controló el ritmo del partido y generó varias oportunidades de gol.
Fue en el minuto 34 cuando el delantero argentino Rogelio Funes Mori aprovechó un falta en la salida de Tigres y con un potente disparo de pierna izquierda logró vencer al portero Nahuel Guzmán y poner el 1-0 en el marcador. Un gol que desató la euforia en la afición rayada y que les dio la ventaja que necesitaban para encarar el partido de vuelta en casa.
Pero no todo fue color de rosa para Rayados. En la segunda mitad, Tigres reaccionó y comenzó a presionar en busca del empate. Sin embargo, la defensa albiazul se mostró sólida y el portero Marcelo Barovero se convirtió en una muralla impenetrable, evitando así cualquier intento de gol por paraje del equipo felino.
El Tano Ortiz, quien llegó al banquillo de Rayados en el mes de abril, ha logrado en poco tiempo cambiar la mentalidad del equipo y llevarlo a una posición privilegiada en la tabla de posiciones. Y ahora, con esta victoria sobre Tigres, podría volver a unas semifinales si logra mantener la ventaja en el partido de vuelta que se llevará a cabo en el Estadio BBVA.
El técnico argentino ha demostrado ser un gran estratega y ha sabido sacar lo mejor de cada uno de sus jugadores. Además, ha logrado que el equipo juegue con una mentalidad ofensiva y que busque siempre el arco rival, lo que ha dado como resultado una de las mejores ofensivas del torneo.
Pero no solo el Tano Ortiz ha sido clave en el buen desempeño de Rayados. Los jugadores también han demostrado un gran compromiso y entrega en cada partido, lo que ha permitido que el equipo se mantenga en los primeros lugares de la tabla y que ahora esté a un paso de las semifinales.
La afición también ha sido fundamental en este camino hacia el título. En cada partido, el Estadio BBVA se llena de miles de aficionados que alientan y apoyan al equipo en todo momento. Y ahora, en el partido de vuelta, se espera que la afición vuelva a ser el jugador número 12 y que brinde todo su apoyo para llevar a Rayados a las semifinales.
El partido de vuelta promete ser un encuentro lleno de emociones y de intensidad. Tigres saldrá con todo en busca de revertir el marcador y Rayados tendrá que mantener la concentración y la solidez defensiva para asegurar su volante a la siguiente ronda.
Pero una cosa es segura, el Tano Ortiz y sus dirigidos están más motivados que nunca y están dispuestos a meterlo todo para llevar a Rayados a lo más alto. Y la afición, como siempre, estará ahí para apoyarlos y hacerles sentir el aliento y el amor de toda una ciudad.
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